Nuevo año, nueva década, y comienza otra temporada oficial de la Orquesta Sinfónica de Antofagasta. El concierto inaugural, contiene no uno, no dos, sino que tres ganchos que lo convierten en un evento que el público local simplemente no debiese dejar pasar.

Primero, la presencia como directora invitada de Natalia Salinas. Esta maestra argentina ha sido una que ha liderado la toma de la batuta por parte de mujeres en nuestro continente. La paridad de género ya es un hecho para un rol que fue dominado por hombres durante décadas.

Su venida resalta la temporada con que la OSA celebra los 250 años de Beethoven. Y en este concierto inaugural se escucharán su Primera Sinfonía y la dramática obertura “Las Criaturas de Prometeo”.

Luego, tenemos la presencia de otra músico que hay que ver. La clarinetista chilena Kathya Galleguillos ha desarrollado un trabajo sistemático a favor de la música chilena y el trabajo directo con nuestros creadores. Su técnica y su sonido resonarán con fuerza en el Teatro Municipal local.

Galleguillos será solista (y este es el tercer “gancho”) en “Fugaz Éxtasis de una Madrugada”, obra de Manuel Bustamante, estreno absoluto de este joven y talentosísimo compositor, del cual el público antofagastino ya pudo conocer su pluma el año pasado, cuando la OSA interpretó su música.

Argumentos suficientes para comenzar con fuerza esta temporada musical, que promete ser la más contundente en muchos años, y que quedará en la memoria de la historia cultural de la ciudad.